Despúes de casi cuatro años sin tomar parte en una marcha de carretera, este domingo me he vuelto a «estrenar» en la de Vilafranca del Penedès.
Volver a sentir la adrenalina de la «competición» (ya se que no son competitivas, pero no nos engañemos, porque realmente son más carreras encubiertas que no salidas para disfrutar del paisaje. Por lo menos en los primeros puestos) hizo que volviese a sentir ese cosquilleo característico por todo el cuerpo debido a la excitación previa a la salida.
El día amaneció nublado y en ningún momento asomó el sol en toda la mañana, pero la temperatura fue ideal para correr con el chaleco abierto y el maillot corto con los manguitos. El ritmo de carrera también se encargó de que no sintiese frio en ningún momento y es que el primer puerto se subió muy rápido. Bueno, el primero, el segundo, el tercero…… ¡Todos! Desde mi punto de vista o más bien diría, desde mi estado de forma (que no considero que sea malo) se fue muy rápido en todo momento, a escepción quizás del tramo entre Aiguaviva y Santas Creus(antes del desvio de empezar el puerto de la Torreta).
Al final de la Torreta el grupo ya se quedó muy reducido con poco más de 15 integrantes. Y esos mismo más o menos fuimos los que coronamos a todo pastilla el Alto de la Llacuna.
Pero fue en el descenso hasta la «tachuelita» de Font Rubí, donde se esfumaron mis opciones de llegar en el grupo de cabeza. Debian de quedar unos 4kms para empezar a subirlo, cuando en medio de la grupeta de 15 que ibamos, hubo un enganchón y se cayeron delante mio dos ciclistas a más de 50kms/h. ¡Espeluznante imagen! Además del susto de ver la caida en directo, el hecho de esquivarla por milimetros me dió un subidón de adrenalina con el que no contaba. El grupo se partió en dos y ya no tuve ocasión de empalmar en la bajada. Para más inri, al empezar el puerto me entraron calambres en ambas piernas. Que me imagino que se debieron a la suma del cansancio con la adrenalina.
Coroné la «tachuela» como pude y bajé hasta Vilafranca totalmente solo. «Desgraciadamente» en la entrada al pueblo me pillo un grupo de seis, que con los coches de por medio hizo que en la llegada llegase el último de este segundo grupo. Pero aún así logré una meritoria 11º plaza, marcando un tiempo de 4h02 en los 143kms. ¡Más de 35 de media!
Buen resultado despúes de tanto tiempo apartado de las marchas, pero me quedo con la sensación de que aún se puede mejorar.
Por cierto, el sábado se han de sumar los 85kms de la salida hasta Cunit con las Ratas para completar así un fin de semana ciclista 100%
22 marzo 2010
Categorías: Entrenos, Temporada 2010 . Etiquetas: Bike . Autor: PasQ . Comments: 3 comentarios